11/2/07

Compinches: "Navidades mágicas"

Las pasadas navidades fueron especialmente mágicas en los teatros de Madrid... Ya dejé constancia de las actuaciones que se celebraron y a una de ellas asistió una comentarista habitual de este blog: Magú...

Le pedí que escribiese una crítica del espectáculo de Jorge Blass, "Navidades mágicas", y aquí la teneis, tal cual...

Como ya dije en otro artículo, de vez en cuando prefiero que el "profano" en magia deje fluir sus sentimientos y nos cuente en este blog qué le pareció el espectáculo... No os perdais la crítica de esta nueva "compinche"... Desea que os guste... Gracias por su colaboración...

Magú:
"¿Qué pasa cuando los sueños se hacen realidad? ¿Cuando la magia te envuelve de una manera tan absoluta que todo lo de tu alrededor simplemente desaparece? ¿Cuando no puedes dejar de reír y sonreír porque lo que ves te quita el habla y te corta la respiración dejándote totalmente alucinada? Pues que vuelves a ser una niña de 6 años capaz de creer que LA MAGIA DE VERDAD EXISTE. Y eres capaz de olvidarte de tus preocupaciones de adulto y dejarte llevar por el embrujo que flota en el ambiente.

¿Y qué pasa cuando quien actúa es tu mago favorito y encima eres su ayudante por una noche?... Pues lo que pasa es que las piernas te flojean, el corazón se te acelera y te sientes especial por unos segundos, y lo que es más importante... no puedes borrar esa estúpida sonrisa de tu cara, porque simplemente ¡ERES FELIZ!

La noche del 19 de diciembre de 2006 no pudo ser más especial. Allí estaba yo, sentada en el patio de butacas y rodeada de muy buenos amigos. De repente, las luces se apagaron y el espectáculo empezó con Jorge Blass emergiendo de una caja aparentemente vacía luciendo ese particular brillo en los ojos y esa imborrable sonrisa tan característicos suyos.

Su espectáculo es fresco, gamberro, divertido, ameno. Capaz de transmitir magia…

Me encanta su puesta en escena, siempre acompañada de la música más apropiada. ¡El truco en el que comienzan a aparecer cartas de sus manos vacías constantemente me encanta! Y el de los aros chinos, truco tradicional por excelencia, es impactante porque en esta versión renovada, ¡los aros vuelan! Pero debo reconocer que me parecía mucho más impresionante la versión anterior con la música de Mozart. En ese caso el encanto estaba en la sencillez.

En un momento del espectáculo Jorge Blass lleva a un niño al escenario para hacerle un truco delante de sus narices. Ante unos ojos abiertos como platos y en medio de una fábula que transmite la parte necesaria de leyenda a la ilusión, el chaval observa como un simple hilo previamente dividido en trozos, vuelve a unirse mágicamente. La primera vez que se lo vi hacer, la niña estaba totalmente absorta en el público y no hacía caso alguno del mago... pero la última vez, la “ayudante” se quedó con la boca abierta y totalmente fascinada. Creo que ahí reside el triunfo de un mago, en ser capaz de sorprender a un niño que ya de por sí cree que la magia existe.

No es cuestión de enumerar al detalle todos los juegos que realizó durante la hora y cuarto de espectáculo, como el del gracioso canario Kraus, la silla cambiante, los anillos rebeldes o el origami volador... sólo apuntar el que fue el centro del show. Una parte en la que me sentí una invitada especial. Una caja fuerte, metida en una urna de metacrilato, subida a lo más alto del teatro y cuya llave yo custodiaba. Un recipiente que contenía la predicción de todo lo que después sucedió durante el show, que día tras día quedaba a la entrada del teatro como testimonio de lo sucedido, hasta la próxima actuación, y que ayudé a Jorge a enseñar al público. ¡Qué gran momento!

Por último, como gran colofón final, la rúbrica de Blass. El momento en el que se alía con los elementos, y consigue que la nieve se conjure en el teatro, surgiendo de sus manos y de todas partes.

Acudir a un espectáculo de magia es siempre fascinante para mí, y consigue dejarme con la misma sensación que los buenos conciertos o las mejores películas... la sensación de querer más… Mucho más..."

10 comentarios:

Tony Astonish dijo...

Quería realizar el primer comentario de esta entrada para resaltar la espléndida crítica que ha hecho Magú... ¡¡y eso que dice que no se le da bien!!...

¡¡Enhorabuena Magú por la crítica y por pasarlo tan bien!!...

Gracias...

Anónimo dijo...

Gracias a ti, Tony, por dejarme participar en tu blog. Siempre es un placer. Ha sido divertido recordar aquella noche.
Saludos!

Tony Astonish dijo...

Pues ya sabes Magú que te voy a "pillar" para la crítica del próximo espectáculo que vas a ver: la del MAESTRO Tamariz...

Así es que ya estás prevenida, ehhh...

Saludos.

Anónimo dijo...

Jorge Blass en Bilbao ya!!!

Jorge Blass Bilbon dagoeneko!

Jorge Blass au Bilbao!

Jorge Blass in Bilbao, now!

Llevo cuatro idiomas, se entiende claro o no???

Magu Felicidades por la critica, ha sido acabar de leerla y estaba emocionadillo

Besos magicos!

Reparito 2.07

Tony Astonish dijo...

A lo mejor dejando aquí tu ruego, Reparito, de alguna forma Jorge se entera y va para allá...

Anónimo dijo...

Genial Magu! realmente has hecho una critica excelente! Me has dado unas ganas tremendas de asisitir a una de sus funciones :D

Muchas gracias!

Anónimo dijo...

Gracias a todos de nuevo!! La verdad es que si tenéis la oportunidad, no dejéis de ir a verlo... Aunque Tamariz es un genio inigualable, reconozco que siento cierta predicción por Jorge Blass...!!

Tony Astonish dijo...

¡¡Y eso que Magú decía que no sabía como iba a ser de buena como cronista... pues menos mal!!...

Yo también recomiendo que no os perdais las actuaciones de Jorge Blass... Te las recomiendo Zordor... Y a ti Magú también te recomiendo ver a otros magos (por ejemplo, Alberto de Figueiredo, o Murphy)...

Anónimo dijo...

Sin duda en cuanto tenga la oportunidad, iré a verlos, aunque después de Tamariz mi bolsillo tendrá que reponerse xD

Tony Astonish dijo...

Pues ya te avisaré Magú de próximas actuaciones suyas... cuando el bolsillo se haya recuperado, jejeje...